El Grandioso Pueblo Mágico de Calvillo tiene bastante para ofrecer desde su bien conservada arquitectura colonial, sus calles empedradas y su comercio local que principalmente por sus huertos de cultivo de guayaba es muy común la venta de dulces y licores de este mismo, donde se encuentra entre las edificaciones religiosas más encantadoras de América Latina.
Puede asombrarse con las leyendas que cautivan a cualquiera hasta los más valientes y escépticos, así como dentro del comercio local puede encontrar deshilados y productos de arduo trabajo artesanal.